Desde la Asociación Jábega animamos a los mayores a adquirir hábitos saludables, entre ellos el de la lectura. Y es que, independiente de la edad, la lectura es un hábito saludable para nuestro cerebro.
Leer mantiene el cerebro activo. Previene el deterioro de funciones cognitivas que pueden verse afectadas por el envejecimiento. Y esto es así porque mientras se lee el cerebro realiza múltiples actividades: interpreta palabras, ordena ideas, relaciona conceptos, ejercita la memoria…
Pero, ¿cómo puede ayudar la lectura a las personas mayores?
CONTENIDO DEL ARTÍCULO
Beneficios de la lectura en personas mayores
La lectura tiene múltiples beneficios para quienes la practican, muchos de ellos especialmente beneficiosos para los mayores:
Mejora la memoria
Mientras se lee se memorizan personajes, escenas, situaciones… y además se generan emociones. Las emociones ayudan a estimular la memoria y ayudan a asentar los recuerdos.
Mejora la capacidad de concentración
Leer requiere atención y concentración hacia aquello que estamos leyendo, entrenando estas capacidades que tan alteradas se ven en enfermedades neurodegenerativas.
Incrementa la empatía
Leer, sobre todo temas que proporcionan emociones, ayuda a entender la situación personal de aquellos que nos rodean, a ponerse en el lugar del otro, una habilidad que ayuda a las personas mayores a desarrollar y mantener sus relaciones sociales.
Produce sensación de bienestar
Leer libera estrés, relaja y, como consecuencia, reduce los niveles de cortisol, lo que proporciona una sensación de bienestar al lector.
Entretiene
En muchas ocasiones, las tareas de las personas mayores se ven disminuidas, lo que las lleva a centrarse en problemas o preocupaciones y a sentir sensación de aburrimiento.
El hábito de la lectura ayuda a las personas mayores a entretenerse desarrollando una actividad que, además, mantiene su mente activa.
Evita la soledad
Los libros nos sumergen en sus historias reales o de ficción, ayudando al lector a olvidar que está solo. Si además se cuenta con un grupo con el que compartir esta afición, la soledad dejará de ser un problema.
Ayuda a mejorar la calidad del sueño
La lectura relaja y destensa los músculos, justo lo que el cuerpo necesita para conciliar el sueño. Y no debemos de olvidar que un sueño de calidad es fundamental para prevenir problemas de memoria.
Fomentar la lectura en personas mayores
Existen distintos factores que obstaculizan la lectura en la tercera edad. Algunos de ellos son fisiológicos, como la falta de fuerza para sostener un libro, el deterioro de la vista o el cansancio propio de la edad.
En otras ocasiones la depresión o los pensamientos negativos, como la creencia de que ya no merece la pena aprender nada, hace que la persona deje de lado la lectura.
Teniendo esto en cuenta, si como familiar o cuidador de una persona mayor quieres ayudarle a adquirir el hábito de la lectura, te recomendamos:
- Que le animes a leer por las mañanas, en los momentos de mejor luz
- Elegir lecturas cortas si existen problemas de concentración.
- Usar formatos adecuados en los que la letra sea suficientemente grande.
- Involucrar a la familia, por ejemplo, asignándoles la tarea de leer cuentos a los niños.
- Usar temas de su interés, por ejemplo, aquellos que le resultaban atractivos en su juventud.